En los aledaños del río Salor, en el T.M. de Membrío, en las pizarras y grauvacas precámbricas encajan filones de cuarzo y de esfalerita y galena, en general de escasa potencia, aunque en conjunto fueron en su momento rentables. Los filones tienen orientaciones conjugadas hercínicas (entre N30°E y N40°E). Además de los minerales más rentables como menas de zinc y plomo, aparecen también pirita, calcopirita y arsenopirita (mispiquel), además de siderita y ankerita.
La bocamina presenta un derrumbe en la entrada. La mina es de pequeño desarrollo, habiendo algunos bloques caídos, debido a su alta inestabilidad. Se trata de una estructura subterránea bastante peligrosa, dado que las capas de pizarras están subverticales y tienen poca estabilidad, sobre todo por la alta brechificación y diaclasado que acompaña a las zona de filones. Por si estas no fueran suficientes razones para evitar la entrada , además, es una mina inundada y es un refugio muy importante de murciélagos.
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